viernes, 14 de marzo de 2014

Entre líneas

Tal vez algo en tu mirada removió mis neuronas. Desde que tomé la determinación de escribir líneas escondiendo tu nombre entre ellas, mi estado de ánimo se ha tornado multicolor.
El ejercicio de sonreír se ha vuelto un vicio delicioso al observar las instantáneas que tuve a bien hurtar de tus archivos.
No tengo necesidad de que te hagas consciente de la gran revolución de endorfinas que provocas cuando por casualidad me saludas. Ahora mismo, lo puedo apostar, me estás leyendo y nisiquiera adviertes que mis líneas gritan tu nombre con esa cadencia deliciosa que se vuelve totalmente adictiva.
Cabe la posibilidad de que desees en el fondo tener la confirmación de mis sentimientos para así actuar y convertirnos en un par de títeres jugando al enamoramiento, pero no me interesa, no creo necesario el hecho de mutar nuestra existencia por un breve tiempo de sopor alegre.
¿Sabes que disfruto mucho cuando me saludas con un abrazo?
No hay nada que me guste mas que impregnarme de tu aroma...pues me acompaña hasta mi cama y me ayuda a soñarte.
Podría enamorarme de ti, como una loca, pero por ahora te mantengo inmaculado, como una imagen a la cual puedo adorar sin tener que compartir con el mundo.
Un día de estos, tal vez te deje saber con mi sonrisa que eres tú el dueño de estos pensamientos que plasmo para que de algún modo lleguen a ti.

No hay comentarios:

Publicar un comentario